Precalentar el horno a 175°C (350°F).
En un tazón al lado, combinar el azúcar blanco con las semillas sacadas de la vaina. Para más información, puedes mirar este post. Alternativamente, usar 2 cucharadas de azúcar vainillado preparado. En un tazón mediano o en el tazón de una batidora de pie, mezclar el azúcar (vainillado), la harina, la levadura en polvo, el bicarbonato de sodio y la sal.
Agregar la mantequilla y mezclar a velocidad media-baja durante tres minutos. Debido a que hay tan poca mantequilla, terminará con una textura de miga muy fina.
En un tazón pequeño, mezclar los huevos, el yogur griego, el aceite y el extracto de vainilla hasta que quede suave.
Agregar la mezcla de huevo a la mezcla de harina y batir a velocidad media hasta que se mezclen.
Agregar lentamente la leche y mezclar a baja velocidad hasta que se combinen. No sobremezclar! La masa será líquida.
Meter cápsulas de papel en un molde para cupcakes y rellenar con la masa un poco más de la mitad. La receta por uno rinde 16 cupcakes. No sobre-rellenar porque crece en el horno.Hornear durante 14 minutos y luego probar para ver si están listos. Estarán listos cuando al sacar un palillo no se le pegue masa húmeda. Si no están listos, vuelve a probar en dos minutos. Si aún no están listos, vuelve a probar en otros dos minutos. Dejar reposar de 3 a 5 minutos en el molde y después del reposo, cuidadosamente retirarlos y dejarlos enfriar por completo en una rejilla o en la encimera.