Precalentar el horno a 160°C y forrar el fondo de dos moldes redondos (20 o 23cm) con papel de horno.
En un tazón mediano, combinar la harina, cacao en polvo, bicarbonato y levadura en polvo.
En un tazón grande, mezclar los ingredientes de bizcocho restantes (azúcar blanco hasta el extracto de vainilla).
Tamizar la mezcla de harina sobre los ingredientes mezclados en el tazón grande. Incorporar bien con una batidora de varillas. Es posible que queden pequeños grumos.
Dividir la masa entre los moldes preparados. Hornear 30-35 minutos hasta que un palillo metido en el centro del bizcocho salga limpio. Dejarlos enfriar en sus moldes 20 minutos antes de sacar cuidadosamente los bizcocho y colocarlos en una rejilla para enfriar por completo.
Hacer el Glaseado
En el tazón de una batidora de pie (o de mano), batir la mantequilla con el azúcar glas, el cacao en polvo, y la sal. Detenerla al menos una vez y raspar los lados del tazón.
Agregar el extracto de vainilla y poner la batidora a velocidad lenta. Agregar la leche (o nata líquida, o crema de leche) una cuchara a la vez. Una vez que se haya agregado toda, raspar los lados del tazón y encender la batidora a media-alta. Batir de 3 a 5 minutos hasta que la mezcla esté más ligera y esponjosa.
Construir la Tarta
Poner una capa de bizcocho (enfriado por completo) en un plato. Esparcir una taza de glaseado encima. Poner el otro bizcocho encima y cubrir la tarta entera con el glaseado restante.
Notas
Por lo general, guardo las tortas en capas en el refrigerador para ayudar a mantenerlas ordenadamente apiladas y evitar que las capas se deslicen. El glaseado de crema de mantequilla americana de chocolate se endurecerá cuando se enfríe en el refrigerador.Prefiero servir este bizcocho a temperatura ambiente para que el glaseado quede suave, así que saco el bizcocho de la nevera unos 20 a 30 minutos antes de servir. O simplemente puedes almacenar la torta a temperatura ambiente.Este bizcocho se puede guardar 3 días en la encimera o 5 días en la nevera, ¡siempre envuelto bien en plástico! Recuerda que el aire del frigorífico deshidratará tus productos horneados y los dejará secos.