En una olla mediana, combina las fresas troceadas, el azúcar, y el zumo de limón. Coloca a fuego medio y deja hervir, revolviendo ocasionalmente. Las fresas liberarán zumo sin necesidad de triturarlas.
Reduce el fuego y cocina a fuego lento 20-23 minutos o hasta que la salsa espese, revolviendo ocasionalmente. Retira del fuego y enfria a temperatura ambiente. Ten en cuenta que la salsa se espesará un poco a medida que se enfríe y aún más con la refrigeración.
Opcionalmente, puedes licuar la salsa con una licuadora para que quede más suave. Además, puedes colarla para quitarle las semillas.